Shagufta Kiran es condenada a muerte, madre de cuatro niños, recurrirá la sentencia. Una mujer cristiana en Pakistán ha sido condenada a muerte por compartir presuntamente mensajes blasfemos en WhatsApp, pero sus abogados, respaldados por una destacada organización benéfica católica, han prometido recurrir la condena.
La sentencia hecha a Shagufta Kiran, logra recordarle al mundo que en la actualidad puede haber mártires. Cada mes de noviembre, durante la “Red Week” -evento realizado por ACN-, la Fundación Pontificia Internacional hace lo posible para que estas situaciones sean conocidas; allí, los fieles de la Iglesia católica son invitados a encender una luz roja como símbolo del sufrimiento de los millones de cristianos que padecen persecución.
Shagufta Kiran, una ex-enfermera de 40 años, fue condenada a muerte el pasado miércoles 18 de septiembre por el tribunal de la Agencia Federal de Investigación (FIA) en Islamabad. Además, deberá pagar una multa de 300.000 rupias paquistaníes (unos 950 euros).
La sentencia llega más de tres años después de que agentes de la FIA irrumpieran en su casa en Rawalpindi y la arrestaran, tras una denuncia en la que se la acusaba de haber compartido comentarios considerados irrespetuosos hacia el profeta Mahoma en un grupo de discusión de WhatsApp. Shagufta fue condenada bajo la Sección 295-C de las controvertidas leyes contra la blasfemia de Pakistán, que imponen la pena de muerte obligatoria por insultar al profeta.
En respuesta al veredicto del tribunal de la FIA, el director ejecutivo de la Comisión Nacional (Católica) para la Justicia y la Paz (NCJP) Naeem Yousaf Gill, declaró a ACN: “Estamos profundamente decepcionados. En el caso de Shagufta no se ha hecho justicia. Ella llevará su caso al Tribunal Superior. La sentencia es cruel”.
Además, añadió “instamos a todos nuestros amigos y simpatizantes a orar por Shagufta y por su familia” La NCJP ha estado brindando apoyo paralegal a la familia de la mujer y financiando sus honorarios legales al inicio del caso
“A un nivel más amplio, el estado debe contrarrestar la creciente radicalización que provoca tales incidentes”, añadió el director de la NCJP, organización que recibe apoyo financiero de ACN. Además, Naeem Yousaf Gill ha instado al gobierno de Pakistán a “dirigir su atención de manera estricta” hacia las personas que fabrican acusaciones con mala intención.
La denuncia contra Shagufta fue presentada por Shiraz Ahmed Farooqi, ciudadano musulmán, quien afirmó que ella compartió el contenido supuestamente blasfemo en septiembre de 2020 en un grupo de WhatsApp que él administraba. El abogado de Shagufta, Rana Abdul Hameed, declaró a los medios cristianos que la acusada había insistido en que no era la autora del contenido controvertido compartido en el grupo de WhatsApp, llamado “Pure Discussions” (Discusiones Puras).
“Conocí a Shagufta después de que el juez emitiera la sentencia y puedo confirmar que tiene grandes esperanzas de obtener un resultado positivo de los tribunales superiores”, declaró Farooqui a algunos medios cristianos. “Sin embargo, echa mucho de menos a su familia y desea reunirse con ellos lo antes posible”.
El esposo y el hijo de Shagufta también fueron arrestados junto con Shagufta en 2021, pero poco después fueron liberados. ACN ha brindado apoyo desde hace mucho tiempo al NCJP, que brinda asistencia legal y paralegal a las víctimas de blasfemia y crea conciencia sobre los problemas de justicia que afectan a los cristianos y otras minorías en Pakistán.