En las últimas semanas, colonos radicales judíos han atacado con creciente violencia la ciudad cristiana de Taybeh. El ejército y la policía israelíes, hasta ahora, han ignorado las solicitudes de ayuda de sus habitantes.
Los líderes de las principales iglesias cristianas de Tierra Santa cuestionan la aparente complicidad de las autoridades israelíes frente a los reiterados ataques contra Taybeh, la última ciudad totalmente cristiana de Cisjordania. En las últimas semanas, grupos de colonos han hostigado a sus habitantes y atacado sus propiedades, incluyendo un intento de incendio de la histórica iglesia de San Jorge —también conocida como Al-Khadr en árabe—, que data del siglo V, así como el cementerio local.
Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN) conversó con el padre Bashar Fawadleh, párroco de rito latino de Taybeh, quien describió el aumento de agresiones contra la comunidad:
“Durante casi un mes, todas las mañanas un colono venía a pastar un gran rebaño de vacas entre nuestros olivares, conocidos por su calidad. Aquí la gente vive principalmente de la venta de aceite de oliva. Las vacas han destruido muchos árboles, poniendo en riesgo la cosecha de octubre. Sin esa cosecha, el pueblo no sobrevive”.
El padre Bashar relató también un ataque directo contra la iglesia:
“Un día nos sobresaltamos al ver que más de diez colonos armados atacaban la iglesia de San Jorge. Para nosotros, es un lugar sagrado y muy importante. Prendieron una hoguera junto a la iglesia y detrás del cementerio. Nos quedamos en shock, pero más de 20 jóvenes corrieron conmigo al lugar y lograron extinguir el fuego, mientras los colonos nos observaban, cruzados de brazos”.
Además, los colonos han bloqueado calles con sus vehículos, impidiendo el paso, mientras las principales vías de acceso a Taybeh siguen controladas por puestos de control y barreras del ejército israelí.
Estos hechos se suman a ataques similares en la cercana aldea musulmana de Kafr Malik, donde murieron tres jóvenes palestinos. Para dejar clara su intención, los colonos incluso colocaron una valla publicitaria dirigida a los residentes de Taybeh con el mensaje: “Aquí no hay futuro para ustedes”.
Cuando Ayuda a la Iglesia Necesitada preguntó si se había contactado a las autoridades, el padre Bashar confirmó:
“Llamamos dos veces al centro de coordinación entre el Gobierno palestino y el israelí. Nos dijeron que vendrían, pero nunca lo hicieron. No nos protegieron. No detuvieron a los colonos. Y esto ocurre porque los protegen a ellos. Muchos soldados provienen de las mismas comunidades de colonos y están alentados por los elementos más fanáticos del Gobierno”.
«Pedimos una investigación inmediata y transparente»
En una declaración emitida el lunes 14 de julio, tras la visita a Taybeh del patriarca latino de Jerusalén y representantes de la Iglesia ortodoxa griega y la Iglesia greco-melquita, los líderes cristianos pidieron que los responsables de estos ataques rindan cuentas ante las autoridades israelíes:
“Estos radicales operan con el consentimiento de las autoridades, que facilitan y permiten su presencia en los alrededores de Taybeh. Incluso en tiempos de guerra, los lugares sagrados deben ser protegidos. Pedimos una investigación inmediata y transparente sobre por qué la policía israelí no respondió a las llamadas de emergencia de la comunidad local, y por qué estas acciones atroces quedan impunes”.
También denunciaron que estos ataques “forman parte de una estrategia sistemática contra los cristianos” en toda la región, y exigieron que cesen no solo en Taybeh, sino también en otras partes de Cisjordania.
Los líderes eclesiásticos hicieron un llamado a diplomáticos, líderes políticos y religiosos de todo el mundo para que alcen una voz firme y solidaria por la comunidad cristiana de Taybeh:
“Pedimos oración, atención y acción, especialmente por parte de los cristianos del mundo. Nuestra comunidad ecuménica necesita poder vivir en paz, rezar con libertad, cultivar sus tierras con seguridad y experimentar una paz que hoy parece tan escasa”.
Taybeh llegó a tener 15,000 habitantes, pero la gran mayoría ha abandonado Tierra Santa debido al prolongado conflicto entre Israel y Palestina. Desde el inicio de la actual fase de la guerra, otras diez familias han emigrado. El padre Bashar concluye:
“Los que permanecemos aquí nos arriesgamos a quedarnos en nuestra tierra, aunque las autoridades nos hayan abandonado. Creemos en nuestro compromiso, en que podemos resistir con la ayuda de Dios, de la Virgen María y, especialmente, de nuestro patrón, San Jorge”.
