El Semanario católico en lengua croata, aparecido por primera vez en el año 1922, celebró el centenario de su fundación en 2022. Ciertamente, no se ha venido publicando desde entonces de forma ininterrumpida, ya que la revista semanal fue prohibida por los comunistas en 1945 y no se volvió a editar hasta 2002. Hoy vuelve a ser una voz importante de la Iglesia católica en el país, que antes formaba parte de Yugoslavia y donde conviven musulmanes, ortodoxos y católicos. Esta publicación llega a las zonas más remotas del país y no la leen sólo los católicos. Miroslav Cahar, el director del Centro de Comunicación de la archidiócesis de Vrhbosna, que edita la revista, señala: “Han pasado muchas cosas desde entonces: Hubo que soportar muchas cosas, pero también se pudo experimentar en abundancia la gracia de Dios”.
Entretanto, los retos que afronta la Iglesia en Bosnia ya no se derivan del comunismo, sino de la progresiva islamización promovida por los Estados árabes y de la necesidad de reconciliación entre los diversos grupos étnicos del país, que sigue sufriendo las consecuencias de la guerra civil de los años noventa. Y a ello cabe añadir la crisis general. “En tiempos difíciles como estos, nuestra revista puede animar, consolar y enriquecer a muchos que están solos, deprimidos y confusos. Como voz nuestra que habla sobre nosotros, es la señal de que aquí la Iglesia sigue viva”, asegura Cavar.
El Semanario católico se publica 50 veces al año, cada vez con una tirada de 2.500 ejemplares. Los costes de impresión han aumentado como consecuencia de las crisis de los últimos años, y como nosotros queremos evitar que esta importante voz católica de Bosnia-Herzegovina enmudezca, nos gustaría apoyar su publicación de nuevo este año con 30.000 euros.